Los paneles sándwich de poliuretano se utilizan para muchos tipos de construcción. Desde naves industriales hasta edificios públicos o viviendas particulares.
Consta de dos láminas de acero galvanizado y un núcleo de poliuretano inyectado de alta densidad, lo que asegura una baja transferencia de calor. Además, funcionan de manera muy eficiente en todas las condiciones climáticas y meteorológicas.
La durabilidad de los paneles sándwich
Hace que se utilicen habitualmente en la construcción como aislantes en: cubiertas, tejados, fachadas y tabiques.
Esto se debe a que es una estructura estable, rápida y ligera con excepcionales propiedades de aislamiento térmico.
El poliuretano es uno de los mejores tipos de aislamiento del mercado, pero también es una barrera impermeable que no permite el crecimiento de bacterias u hongos y, además, no produce olores.
Durabilidad de los paneles sándwich: una opción para la construcción sostenible
Dados los objetivos de sostenibilidad marcados por la Unión Europea, una de las características más importantes de los paneles sándwich es su contribución a la sostenibilidad.
La durabilidad del poliuretano es muy superior a la de los edificios y las propiedades aislantes se mantienen intactas durante más de 50 años.
Rapidez en su montaje y construcción
Los paneles aislantes además de una gran durabilidad permiten una construcción rápida y seca, ahorrando tiempo de construcción y una mejor eficiencia energética. Por ejemplo, en una hora una persona puede montar hasta 10 m 2 de paredes con paneles sándwich.
Otra ventaja de los paneles es que se cortan según las necesidades de la obra.
Además, dado que se produce en un proceso industrial continuo, no se desperdician materiales.
Todas estas ventajas contribuyen a que los paneles sándwich se utilicen cada vez más en la construcción de viviendas eficientes.